Buenas,

Desde la asociación HEPA (Asociación Española de Ayuda a Niños con Enfermedades Hepáticas y Transplantes Hepáticos) os queremos trasladar lo siguiente:

Las personas sanas que en vida donan un órgano (donantes vivos) a una persona enferma, que los necesita para seguir viviendo, se enfrentan a un grave problema laboral a causa de su altruismo: LA FALTA DE COBERTURA LABORAL DE LOS DONANTES VIVOS.

Esta problemática a la que se enfrentan los donantes vivos es debido a la falta de reconocimiento oficial de baja por incapacidad temporal para ellos, con el alegato de que se trata de un “acto voluntario al que se somete la persona”, situación que acarrea o trae como consecuencia en numerosos casos el cese de contratos laborales o despidos a causa de las faltas al trabajo a consecuencia de las respectivas revisiones y el periodo post operatorio.

La legislación laboral española no prevé protección para las intervenciones quirúrgicas a las que se accede de forma voluntaria, sin hacer ninguna distinción entre ellas, ya sea una donación de órgano o una cirugía estética. La persona que voluntariamente decide salvar la vida a alguien y por ello deja de trabajar el tiempo que implica el ingreso hospitalario y la recuperación tras la donación, suele tener represalias laborales e incluso es penalizado al contratar una póliza de seguro (su cuota es más cara).

EXIGIMOS GARANTIA DE SALUD para lograr una modificación legal laboral que impida que un donante sea despedido del trabajo por no estar protegido por una baja laboral, o se le reduzca el salario el tiempo que está ausente por la misma causa. Ambas circunstancias se dan en la actualidad. PEDIMOS que estos donantes sean equiparados a una embarazada, situación a la que también se accede voluntariamente. "El donante ayuda a salvar una vida, hace un bien social, y por ello se le debe al menos proteger laboralmente”.

LUCHAMOS porque se le conceda al donante vivo un régimen de protección similar a la que tiene la mujer en la maternidad, es decir, garantizarle el mantenimiento del puesto de trabajo y la obtención de la baja laboral durante el período de recuperación (hoy existen donantes que han perdido su puesto de trabajo a raíz de la donación). De esta manera al menos, el trabajador no vería afectada su nómina (en caso que el convenio no complete) y se le aseguraría el mantenimiento del puesto de trabajo y la empresa no tiene que pagar los seguros sociales en el tiempo de baja más la persona que sustituye al donante.

En nuestra opinión, es de justicia que, tras el acto de contribución social realizado por el donante vivo, se le proteja de manera que esta protección permita alcanzar un equilibrio, nunca completo, entre el beneficio obtenido por la sociedad en su conjunto y el riesgo altruista asumido por parte del donante.

Sirva el presente artículo de propuesta legislativa para nuestro gobierno, que no puede dar la espalda al problema que se ha planteado en esta petición y que existe; máxime teniendo en cuenta lo pionera que ha sido España hasta ahora en el mundo de la donación y los trasplantes de órganos.

Tengan muy presente que el trasplante de hígado de donante vivo, se inició para solucionar la falta de donantes apropiados para niños, lo que motivaba una mortalidad en lista de espera en torno al 30-40%. Y en los trasplantes de riñón permite reducir los costes económicos y de tiempo que supone la diálisis. En Pediatría sobre todo, es una alternativa muy válida en los pacientes en los que está indicado, ya que permite programar el trasplante en el mejor momento para el paciente y el paciente está menos grave, lo que evita deterioro crónico en el paciente y en muchos casos, su fallecimiento mientras espera un órgano de donante cadáver.

Por eso los valientes que deciden arriesgarlo todo (donantes vivos) para SALVAR UNA VIDA debe disponer de las mismas garantías, derechos y coberturas que una maternidad/maternidad. Así, conseguiremos más donaciones, más vida.

Señores diputados, 10 meses después de que escucharan nuestra petición, las cosas no han cambiado. En el país que lleva 25 años consecutivos siendo líder en donación y trasplante, ¿cuántos donantes más van a tener que ser castigados para que ustedes arreglen la situación, creando la figura de baja laboral por donación?