Soy Jessica Moreno, mamá de Azul, una niña de 10 años que intenta ser feliz y que desde el año pasado comenzó con síntomas que hoy sabemos se debe a una anemia aplásica, una enfermedad rara que impide que su médula ósea produzca suficientes células sanguíneas nuevas.

Al inicio de este camino que aún no terminamos de recorrer no pensaba que fuera tan complicado como lo es en estos momentos. Los doctores me dieron las mejores expectativas de vida para Azul, pero el temor de alguna recaída siempre está presente y más cuando existe el riesgo de tener un desenlace fatal.

Como mi Azul, existen muchos niños en el Centro Médico de La Raza del IMSS en la Ciudad de México que requieren un tratamiento especializado y transfusiones de sangre. De estas últimas es con lo que más se batalla, porque no saben lo difícil que es para uno como papá lograr reunir a los donantes que se nos requieren.

Lamentablemente en nuestro país no existe la cultura de donación de sangre altruista. No todos saben que este puede ser un acto heroico, ya que una de esas bolsas de plaquetas puede mantener con vida a un niño, niña o adolescente que está luchando contra la leucemia.

Por eso me atrevo a preguntar directamente a los integrantes del Congreso de la Ciudad de México y a las y los políticos involucrados en el tema: ¿Qué se está haciendo para fomentar la donación altruista de sangre y salvar la vida de la niñez con anemia aplásica?

En nuestro caso, en al menos tres veces hemos tenido que esperar hasta un día entero para una transfusión sanguínea y de verdad, no puedo describir en palabras el enorme nudo en la garganta de no saber si tu hijo resista no días, ¡horas! sin una bolsa de sangre para seguir viviendo.

Eso es algo que no le deseo a nadie, mucho menos a los padres que vienen de otras partes del país y que por falta de recursos o de apoyos, deben permanecer en el hospital a esperar que el tratamiento de su hijo termine, lo cual puede durar días, semanas, o meses incluso.

Creo que esta situación puede atacarse si desde el Gobierno se intensifican las campañas de donación altruista de sangre y por ello pido a las y los Diputados del Congreso de la Ciudad de México que intervengan y nos ayuden a que sea una realidad.

Para ello necesito de tu apoyo. Con tu firma y la de al menos 300 personas más, podremos llevar esta petición directamente al Congreso local de la Ciudad de México y solicitar una respuesta pública aquí mismo en el portal de Osoigo.

Mientras tanto, seguiremos en pie de lucha contra la anemia. Yo con mi hija Azul acompañándola como la gran guerrera que es y nosotros junto a todas las familias que pasamos por lo misma incertidumbre. 

Porque recuerden: el cáncer no distingue raza, color, género o condición salarial, solo llega. Y por eso, debemos ayudarnos entre todos.

De verdad, muchas gracias por tu apoyo.

Jessica Moreno.