Por supuesto, Fer.

Tengamos en cuenta que detrás de un corrupto, hay siempre un corruptor con unos intereses muy definidos que requieren de una compleja organización financiera, jurídica y fiscal. Actualmente, por desgracia, se está poniendo el acento solamente en l@s corrupt@s dejando a un lado a los corruptores. Con lo cual estamos - por utilizar un símil - capturando al camello y no al traficante. Es decir, quedarnos en el análisis simplista que no nos permite llegar a la raiz del problema. A mi juicio, lo que ocurre es que esto lleva a la ciudadanía a contemplar la corrupción como hechos aislados y no como una parte fundamental del sistema económico capitalista, al que la corrupción le es intrínseca. 

Un saludo y gracias por la pregunta