Somos Acción Feminista Ovalle, un grupo diverso de mujeres que activa el territorio desde el 2015, realizando intervenciones y visibilizando la violencia de género, entre otras temáticas.

Durante el primer semestre de 2020, levantamos información a través de la ley de transparencia, encuestas y entrevistas para elaborar el “Informe Monitoreo Social Implementación Ley IVE Región de Coquimbo”, con el objetivo de aportar información al  “Informe de Monitoreo Social: Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo y la Salud Sexual y Reproductiva en tiempos de coronavirus 2020”, realizado en conjunto con la Mesa de Acción por el Aborto en Chile y otras organizaciones de diferentes regiones del país.

Si bien, la ley IVE ha sido importante en el proceso de lucha de las mujeres con respecto a la salud sexual y reproductiva, no ha estado exenta de problemáticas, lo que dificulta que se cumpla a cabalidad.

Uno de los hallazgos más significativos se refiere a la falta de conocimientos de las usuarias sobre esta ley, como uno de los principales obstáculos para el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo. Los hospitales y centros de Atención Primaria de Salud no cuentan con material visual, ya sea a través de afiches, volantes, trípticos u otros que puedan contener información al respecto.

La barrera idiomática y cultural en las atenciones, es otro obstáculo a considerar. A falta de facilitadores interculturales, algunos profesionales que manejan el creole ayudan en la interacción con la comunidad haitiana. Pero no existe un reconocimiento formal frente a las diversas culturas que habitan el territorio, y que se encuentran en las zonas más rurales y de difícil acceso. Es más, los funcionarios de salud entrevistados dicen casi no atender a pacientes de pueblos originarios (en la región de Coquimbo según Censo 2017, poseía una tasa de 8,9 % de población
perteneciente a etnias o pueblos originarios).

Algo similar sucede con mujeres sordas. Los/las profesionales asumen que estas mujeres ingresan a las atenciones con algún acompañante que funciona como intérprete de lengua de señas, porque en la práctica es así, como si fuese algo inherente a la condición de ser sorda. Así como no existen capacitaciones para sortear los obstáculos de las barreras idiomáticas, tampoco existen para las lenguas de pueblos originarios o inclusivas como lenguaje de señas.

Además, en tiempos de pandemia se ha tenido que reorganizar la atención en los centros de salud y esto ha tenido un impacto negativo directo en las atenciones de la salud sexual y reproductiva de las mujeres, que ya de antemano dejaba bastante que desear.

Queremos transmitirles a los representantes políticos y autoridades que es de vital importancia, poder desplegar campañas masivas adaptadas al contexto pandemia para dejar de invisibilizar los derechos que tienen las usuarias para la interrupción del embarazo en sus tres causales, de este modo, se puede optimizar el sistema de pesquisa de casos y abordar oportunamente en caso de que exista peligro para la vida de la mujer, inviabilidad fetal de carácter letal o embarazo por violación, sin estigmatizarlas. 

Para conseguir visibilizar este tema y recibir una respuesta, necesitamos el apoyo de todas y todos ustedes. Si conseguimos 250 apoyos recibiremos una respuesta en esta misma web. Ayúdanos haciendo clic en el botón “apoyar” y difundiendo.