Pregunta para Senado de México
¿Por qué no se garantiza una educación sexual integral a nuestras niñas, niños y adolescentes en México?



Hola, somos las psicólogas Valeria y Berenice, ambas participamos en una plataforma de formación en sexualidad integral que llamamos Sextudiando, el cual surgió como un proyecto escolar y que hoy ofrece una forma distinta en enseñanza sobre sexualidad a niñes y adolescentes en nuestro país.
Desde que comenzamos con este proyecto, nos dimos cuenta de la enorme oportunidad y necesidad de una plataforma de formación de sexualidad integral, que lamentablemente es de difícil acceso para nuestra niñez y juventud, situación que debemos cambiar.
Esta inquietud no es nueva y se remonta a 1930. Desde entonces hay varios intentos por enseñar a niñes y adolescentes cómo descubrir y ser responsables con su sexualidad.
Sin embargo, se han tomado otras líneas de acción como el control demográfico, el infundir temor en lugar de ofrecer orientación y otras prácticas que deben ser erradicadas acorde a los contenidos de educación sexual, desde un enfoque integral, contemplada en la Ley General de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, aprobada en 2014, pero que irónicamente en el Nuevo Modelo Educativo de 2017, presentado por el entonces Secretario de Educación, Aurelio Nuño, no incluye el tema de sexualidad.
Por eso preguntamos directamente a los y las Senadoras que participan activamente en las comisiones de Salud, Educación y Derechos de la Niñez y la Adolescencia: ¿Por qué no se garantiza una educación sexual integral a nuestras niñas, niños y adolescentes en México?
Un esfuerzo parecido al nuestro se realizó en agosto de 2008, cuando el Gobierno del entonces Distrito Federal (GDF) publicó el libro “Tu futuro en libertad. Por una sexualidad y salud reproductiva con responsabilidad”.
No obstante, la obra no pudo ser distribuida en las escuelas de la ciudad, pues el Gobierno del Distrito Federal no controla los servicios de educación básica y normal, los cuales continúan bajo la administración de la federación.
Las autoridades federales se negaron a distribuirlo aduciendo que debía ser valorado por la unidad responsable de Materiales Educativos e incluso se amenazó con una sanción administrativa a los docentes que lo utilizaran.
La investigadora Gabriela Rodríguez expone en su libro Treinta años de educación sexual en México, “la educación sexual propicia la comunicación familiar, fortalece los procesos de secularización, mejora las prácticas sexuales, previene embarazos e incrementa el uso del condón”, (Rodríguez, 2004). Lo cual es cierto, pero el reto es mucho mayor que ello.
Aún falta mucho camino por recorrer. La evidente postura de los sectores conservadores en torno a la educación sexual no se ha modificado e incluye creencias e ideas alejadas de los planteamientos científicos.
Con ello se anula el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, también se niegan a brindar información sobre sexualidad a infantes y adolescentes, se rechaza la diversidad sexual y la diversidad de género, no se acepta el amor entre personas del mismo sexo, se está en contra de la interrupción libre del embarazo y las relaciones sexuales fuera del matrimonio.
Incluso representantes de organizaciones religiosas y líderes civiles cercanos a una ideología conservadora, como la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) ha culpado a la educación sexual “de hipersexualizar a la niñez y promover la homosexualidad”.
“Nada más lejos de la realidad, ya que a estas alturas del siglo XXI, la educación sobre sexualidad en México apenas toca temas que vayan más allá de aspectos básicos sobre la prevención del embarazo y del VIH en la mayoría de las escuelas”, (Baruch, 2018).
Para cambiar la forma en que se enseña la educación sexual en México, pedimos que firmes esta petición para que junto a 500 personas más podamos llevarla directamente a nuestros y nuestras tomadoras de decisiones en el Senado de la República y solicitarles una respuesta pública aquí mismo en el portal de Osoigo México.
Con tu apoyo podremos lograr un cambio que mejore la calidad de vida de cientos de niñes y adolescentes que requieren atención especializada sobre su salud reproductiva y sexual.
¡Muchas gracias!
REFERENCIAS:
BARUCH, Ricardo (2018). “El nuevo ataque a la educación sexual”. Huffpost, 6 de marzo (blog).
(GDF). Gobierno del Distrito Federal (2008). Tu futuro en libertad. Ciudad de México: GDF.
LA JORNADA (2008). “Educación sexual: importancia y oposiciones”. La Jornada, 7 de agosto.
RODRÍGUEZ, G. (2004). “Treinta años de educación sexual en México”. En Micher, M. (coord.) Población, desarrollo y salud sexual y reproductiva, 13-28. Ciudad de México: Cámara de Diputados.
TAPIA, Margarita (2017). Educación sexual para todas y todos: la asignatura urgente para el logro de la igualdad en México. San Luis Potosí: Congreso Nacional de Investigación educativa.
(UNPF). Unión Nacional de Padres de Familia (2018). “UNPF lamenta algunos contenidos de los nuevos libros de texto”. Unión Nacional de Padres de Familia, 21 de junio.