Hola, soy Nacho Torre-Marín, concejal no adscrito del ayuntamiento de Torrevieja y usuario de silla de ruedas a motor desde el año 97. En el año 59 y durante la epidemia europea contraje la polio, enfermedad por la cual tengo una diversidad funcional. Tuve la fortuna de vivir durante muchos años en el extranjero, donde el tema de la accesibilidad está mucho más adelantado. Pero al volver a España en el año 2009 y ver la enorme falta de accesibilidad que hay, comencé una lucha continua e imparable por el derecho que debemos tener todas las personas de poder movernos con independencia y libertad.

Cuando salgo de casa, el 95% del tiempo me veo obligado a ir por la carretera corriendo el riesgo de ser atropellado. A muchos sitios de la ciudad no tengo acceso porque no están adaptados. Las aceras son estrechas, las baldosas son antiguas y resbaladizas y los rebajes a veces son inexistentes. Las personas en silla de ruedas deberíamos poder tener acceso libremente a cualquier sitio y no depender de que alguien empuje nuestras sillas para hacer una vida normal y subsanar los obstáculos.

Es necesario que el dinero se redirija a lo que es fundamental para que podamos salir con libertad e independencia a la calle. Hay que poner en marcha infraestructuras, calles y carreteras para que nos podamos mover, podamos entrar a los locales… Las leyes establecen que tiene que haber una entrada accesible en todo lugar público y no se está cumpliendo. Esto lo que provoca es que, como no podemos ser independientes, no salimos a la calle y, si no salimos, a ojos de las instituciones no somos tantas personas las que vivimos sin esa libertad, por lo que no lo ven como una prioridad y el problema nunca desaparece.

En pleno siglo XXI los accesos deberían estar adaptados para todo el mundo. Por eso es necesario que desde la diputación de Alicante se ejecuten los presupuestos invirtiendo el dinero necesario para solventar las prioridades principales del bienestar social de las personas con diversidad funcional. No puede ser que el mayor gasto siga invirtiéndose en ocio cuando las personas que vamos en silla de ruedas tenemos que ir por la carretera y con miedo a ser atropellados. Es necesario priorizar e invertir en un Plan de Accesibilidad extensivo para que se respeten nuestros derechos y las personas con diversidad funcional podamos tener una vida libre e independiente.