Soy Miguel Zarate, tengo 28 años y soy un administrador público en formación con estudios en ciencias políticas. Desde los 16 años he estado involucrado en la política y durante más de 8 años he mezclado lo mejor del marketing político y digital para asesorar a grupos de interés en temas políticos. He trabajado con congresistas y diputados, pero también me he dedicado a involucrar a los jóvenes en el tema político y a transmitir mis conocimientos sobre cómo incidir en política. Y aunque a mis 28 años tal vez no entro en la categoría de “joven”; al igual que ellos, quiero una mejor Colombia. 

Sin embargo, es muy poca la participación política de los jóvenes en el país y actualmente hay una falta de incentivos por parte del Estado para que ellos participen. Pero no me refiero solamente a la participación en política electoral, sino en todo tipo de escenarios de incidencia política tales como movimientos sociales, espacios comunitarios, colectivos, grupos cívicos, asociaciones y otros organismos que trabajen en pro del país. Así, para estos jóvenes activistas que están trabajando por el futuro colombiano, debería haber incentivos tal como el acceso a la educación superior. 

Estos incentivos podrían facilitar el acceso de jóvenes activos políticamente a técnicas, tecnológicas y universidades. Por ejemplo, lo que ahora conocemos como la matrícula 0 que fue expedida por el presidente Iván Duque por medio del Decreto Legislativo 662 de 2020 bajo un Estado de Emergencia en el marco del Covid-19, debería incluir un artículo que priorice el acceso al beneficio a jóvenes que realmente están haciendo algo. Así, este decreto, que está por convertirse en política de Estado permanente a través de 3 proyectos de ley que cursan actualmente en el Congreso, debería priorizar la selección de jóvenes involucrados en temas beneficiosos para el país tales como la participación política, lucha por el medio ambiente, defensa de causas sociales y otros. De esta manera, debe existir una cuota para jóvenes que participen en política que garantice su acceso al programa entre los topes máximos de matrícula establecidos por el Fondo Solidario para la Educación.

Por otro lado, estos jóvenes deberían contar con incentivos que mejoren sus posibilidades de admisión a programas técnicos, tecnológicos y complementarios gratuitos a través del SENA, Servicio Nacional de Aprendizaje. Además, se podría pensar en otros beneficios para estos jóvenes como descuentos en recursos bibliográficos, programas educativos adicionales con énfasis en liderazgo o incluso el acceso a la Tarjeta Joven física con diferentes descuentos y beneficios. Ligar estos beneficios a la participación política serviría como una vía para invitar a más jóvenes a participar en política y para que la educación superior sea realmente aprovechada por los jóvenes que están siendo productivos y activos en nuestra sociedad. 

Los jóvenes son nuestra esperanza de tener un mejor país y serán ellos los encargados de nuestro futuro. Ellos pueden generar tanta presión que pueden lograr cambios en beneficio de los ciudadanos colombianos. Recordemos que hace apenas 30 años tuvimos el ejemplo de una reforma constitucional impulsada por jóvenes a raíz de la Séptima Papeleta. Esto nos demuestra que el futuro sí es de los jóvenes. Y sí, es una frase cliché, pero es un cliché que es cierto. Por esto, es importante que a través de incentivos formemos a los jóvenes y despertemos su interés por participar en la política. Adicionalmente, sea cual sea la iniciativa que se haga, debe haber una obligatoriedad de difusión de la información para que las políticas realmente sean conocidas y no queden en el olvido, como muchas otras. 

En nuestro contexto actual de paros, marchas y elecciones presidenciales a la vuelta de la esquina, es aún más necesario incentivar la participación política juvenil y brindar a los jóvenes las herramientas que necesitan para asumir los retos políticos del futuro. Ayúdame a que nos escuchen quienes pueden hacer algo al respecto. ¡Firma esta campaña y compártela con tus contactos! Si llegamos a 350 firmas, se presentará la petición a los miembros del Congreso para que nos den una respuesta. ¡Muchas gracias!