Pregunta para Parlamento de Andalucía

Estoy superando una Leucemia bifenotípica. Mis hermanos me pudieron dar médula ósea, pero mi caso es excepcional. Solo 1 de cada 4 pacientes tiene familiares compatibles: ¿Por qué no se impulsan campañas de concienciación en este sentido?

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Me llamo María del Mar, tengo 31 años y vivo en Lora Del Río, Andalucía. He estudiado tres carreras, un máster y el verano del año pasado aprobé unas oposiciones. Cuando me quedaban diez días para empezar a trabajar, fui a hacerme unas analíticas porque me notaba poco enérgica. Allí me diagnosticaron una Leucemia bifenotípica, un tipo de enfermedad que solo afecta al 5% de la gente a quien le diagnostican Leucemia. Se trata de una combinación de la Leucemia Linfoblástica y la Leucemia Mieloide.

Enseguida empecé con un tratamiento de quimioterapia y un mes después, los médicos ya me plantearon el hecho de que necesitaba un trasplante de médula ósea. Me preguntaron si tengo hermanos e hicieron analíticas a toda mi familia. Los resultados indicaron que mis tres hermanos son compatibles conmigo al 100%. Esto es una suerte y es muy difícil de que pase. Según las estadísticas, solo 1 de cada 4 pacientes tiene familiares compatibles. En noviembre de 2020 me hicieron el trasplante y he respondido muy bien. Los primeros tres meses con la enfermedad fueron duros, pero estoy recuperando la vida y la actividad física. Me han anunciado, además, que en verano seguramente podré hacer vida completamente normal.

Durante todo el proceso de enfermedad me he encontrado con mucha gente que también padece leucemia y que no tiene al lado a ningún familiar compatible. Es por este motivo que quiero incidir en la necesidad de hacer campañas de concienciación sobre la importancia de donar médula y sobre el hecho de que dar médula no es doloroso. El procedimiento es similar a una diálisis: te sacan sangre, se quedan con las células, y a la vez te vuelven a poner sangre. Creo que si se normalizara el hecho de donar médula de la misma manera que está normalizada la donación de sangre, se conseguirían muchos más donantes y se evitaría que mucha gente se quedara por el camino.

En este sentido, me dirijo a los políticos del Parlamento de Andalucía, ya que son quienes me representan, para preguntarles, concretamente: ¿Por qué no se impulsan campañas de concienciación sobre la donación, haciendo hincapié en la necesidad y en el hecho de que no se trata de un proceso doloroso? También quiero saber si se trabaja o si se plantea trabajar en algún tipo de ayuda económica para la gente que no puede trabajar debido al cáncer y quiero dejar constancia que hay que cuidar los hospitales para que la gente como yo, que después del trasplante tienen que estar un mes aislados en una habitación, puedan gozar de todos los servicios esenciales y tengan garantizada su comodidad.

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