Estados Unidos vuelve a ser noticia gracias a su presidente, nunca exento de polémica. La última medida llevada a cabo por su administración para frenar la llegada de inmigrantes a la frontera con México se traduce en miles de niños separados de sus padres. Algo que encoje el corazón.

Las imágenes están ahí, los vídeos están ahí, las jaulas están ahí. Los menores esperan a que sus progenitores sean juzgados tras entrar ilegalmente en el país. Es sin duda una política de "tolerancia cero", que no debiera afectar a los menores.

El presidente de EEUU anunció durante su reunión con los reyes en Washington que pretende viajar a España. Una noticia que a muchos no nos agrada.

¿Permitirá su gobierno que semejante personaje entre en nuestro país? Si él impide el acceso a millones de personas que buscan en Estados Unidos una vida mejor, ¿por qué no hacer que pruebe de su propia medicina?