Estimado alcalde Francisco de la Torre y concejales del Ayuntamiento de Málaga,

Mi nombre es Lamia Ahmed Ahmed y os quiero dar a conocer el caso de discriminación que he sufrido cuando iba a alquilar un nuevo apartamento en Málaga. 

A lo largo de estos días he estado buscando piso en el barrio malagueño de Teatinos para seguir estudiando el Grado en Criminología de la Universidad de Málaga (UMA). Tuve la fortuna de encontrarme unas chicas  que habían publicado un anuncio en las redes sociales, nos conocimos y decidimos compartir la casa todas juntas.

Hasta aquí todo iba bien, pero los problemas empiezan cuando vamos a firmar el contrato. Una vez acordados los detalles del contrato de alquiler y la gestión de los pagos habituales, la propietaria del piso mediante la agencia inmobiliaria pidió mis datos: mi nombre y apellidos y los de mis padres y dirección. Es aquí cuando la casera no quiso completar el proceso de alquiler ya que, según lo que le dijo a la agencia, “no quería que estuviera en el piso, es de un barrio con mucha delincuencia en el que trabajaba allí como fiscal”.

Os podéis imaginar mi frustración tras sufrir este ataque xenófobo evidente por mi procedencia y por mis apellidos. No me conocía como persona, pero ya me tachó de delincuente.

Este tipo de discriminaciones es habitual en nuestro entorno. Lo sufrimos diariamente, pero si queremos dejar atrás este tipo de comportamientos racistas y tener una ciudad más abierta culturalmente y humana, creo que desgraciadamente el ayuntamiento debe actuar para evitar que suframos estos ataques por parte de algunos vecinos. 

Mi pregunta para ustedes sería: ¿Qué medidas van a activar para que no se den casos de discriminación en el alquiler de viviendas?

Muchas gracias por atenderme,

Lamia