Pregunta para Cortes de Castilla-La Mancha

La defensa personal puede salvar a más de una mujer, adolescente o niña de situaciones de violencia como el acoso o una agresión en la calle. ¿Por qué no se da más visibilidad a esta disciplina desde los colegios, en lugar de estigmatizarla?

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La Verdad de Medusa Pregunta de La Verdad de Medusa

Somos La Verdad de Medusa, un grupo de cuatro personas que nació de la necesidad de ofrecer clases de defensa personal desde un enfoque más cercano con las personas que acuden, ya que muchas han sido víctimas de violencia de género, doméstica o de acoso escolar. También trabajamos para la defensa de los animales.

Nos dedicamos a dar seminarios gratuitos a víctimas y a personas que puedan estar interesadas, no solo enseñando técnicas de defensa personal, sino también ofreciendo ayuda y apoyo psicológico. Por desgracia, son muchas las historias de violencia que hemos conocido y que sabemos que siguen ocurriendo a diario, tanto en espacios públicos como privados.

Con el trabajo que hacemos, ayudamos a víctimas de robo con violencia, acoso, violación, violencia de género, etc. a recuperar la confianza en ellas mismas, a perder el miedo y sanar sus heridas. También trabajamos desde la prevención, dando charlas a chicas jóvenes sobre cómo detectar un posible agresor y cómo actuar al respecto.

En este aspecto, nos gustaría poder dar más formación en los colegios e institutos, pero en muchos casos son reacios porque consideran peligroso que niños y niñas tengan estos conocimientos y puedan utilizarlo desde la violencia. Creemos que hay mucha estigmatización al respecto y que, si se enseña bien y se deja claro que sólo podemos utilizar estas técnicas para defendernos, estos aprendizajes pueden ser muy útiles, especialmente para las alumnas.

Ante esto, queremos dirigirnos a los miembros de las Cortes de Castilla-la-Mancha, ya que somos de Castilla-la-Mancha y son nuestros representantes en dicha cámara, para que se desestigmatice la defensa personal y se fomente su aprendizaje en los colegios, para así prevenir situaciones de violencia que sufren niñas, adolescentes y mujeres a diario.

Ojalá algún día deje de existir toda esta violencia y no necesitemos recurrir a la defensa personal, pero mientras exista, las víctimas o víctimas potenciales necesitan tener herramientas para estar preparadas, tanto física como mentalmente.

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