El tema de ser Otegi candidato a las próximas elecciones se está debatiendo estos días  en pueblos y barrios. En Gasteiz esta misma semana tuvimos  asamblea, y no hubo dudas al respecto,   la gente apostó por Arnaldo Otegi como el mejor candidato  para reforzar y crear ilusión en torno al proyecto de EH Bildu.

Creo que hay numerosas razones. En primer lugar, tiene larga experiencia política, implicación y conocimiento de la sociedad vasca y de lo que ha sido y es la izquierda abertzale. Es buen comunicador y tiene una clara capacidad de liderazgo. Su apuesta   por un cambio de estrategia de la izquierda abertzale y por abrir un nuevo tiempo político ha sido decisiva.  Y precisamente, todo indica que con su encarcelamiento  se quiso  obstaculizar este nuevo proceso. Es evidente que el Estado no ha conseguido su propósito. Y es también evidente que una vez recuperada su libertad, Arnaldo Otegi es un revulsivo para todas aquellas personas que desean que se produzca un cambio político y social en Euskal Herria.

En el velódromo de Anoeta se confirmó plenamente todo lo anterior.  Nunca había visto esas colas para ver a un líder político. Demostró convicción, tener las ideas claras y ser capaz de generar ilusión. Tres cosas imprescindibles para cualquier proceso de transformación y cambio. Por todo ello, Arnaldo Otegi es la mejor opción para liderar el presente y afrontar el futuro.