Pregunta para Senado de México
¿Cuándo se cumplirán las normas que permiten a personas LGBTI+ donar sangre y salvar vidas?



Mi nombre es Gaby Albo, vivo en la Ciudad de México, soy cantante de profesión y déjame contarte cómo casi rechazan mi sangre cuando fui a donarla para salvar la vida de mi tía en el Hospital General de México.
Aquel cinco de junio del año pasado, como todos los que acudimos a donar sangre por primera vez, pasé por todos los filtros hasta que en la última entrevista la doctora que me atendía me preguntó que si era homosexual.
Al afirmar que sí, se inclinó hacia mí y en voz baja me “recomendó” que mejor dijera que no, para que ella lo pudiera poner en el expediente, ya que de lo contrario rechazarían mi donación.
En ese momento acepté la petición de la doctora, pero luego me di cuenta que así estamos normalizando una práctica que además de caer en la homofobia, pone en riesgo la vida de las personas que requieren una transfusión sanguínea para seguir viviendo. Pensé mucho en las niñas, niños y adolescentes con leucemia, por ejemplo.
Por eso pregunto a las y los Senadores de México, a las autoridades que integran el Sistema Nacional de Salud, y del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred): ¿Cuándo se harán cumplir las normas de salud que permiten a personas LGBTI+ donar sangre y salvar la vida de quienes la necesitan?
Este planteamiento lo hago con datos en mano: de acuerdo con el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, tan solo de abril a mayo del año pasado, la donación altruista bajó de 63% a 85% si lo comparamos con el mismo periodo del 2019. Esto orilló al gobierno a aplicar una estrategia nacional para que durante la pandemia por covid-19 se invitara a la ciudadanía a donar sangre.
Pero hay un detalle: hay muchos hospital públicos y privados, también laboratorios y otras instituciones de salud en las que persisten actos de discriminación a personas integrantes de la comunidad LGBTTTIQA durante el proceso de donación.
Esto me despertó el interés de iniciar un movimiento en redes sociales que llamé “Mi Sangre También Cura” y con el que conocí cientos de historias de personas que me compartieron cómo han sido rechazados únicamente por ser homosexuales, contrario a lo que dicta la Norma Oficial Mexicana NOM-253-SSA1-2012.
No es posible que nuestra orientación sexual y un estigma sin fundamentos ponga en riesgo la vida de personas. Por citar un ejemplo, de una sola donación rechazada por ser de la comunidad LGBTI+, pudimos haber salvado la vida de hasta siete niñas, niños o adolescentes.
Definitivamente eso es algo que debe cambiar, en especial por el contexto de emergencia sanitaria que vivimos en la actualidad. La discriminación no debe tener cabida o consideración cuando de salvar vidas se trata.
Únete a esta causa, hagamos valer nuestros derechos y salvemos la vida de quienes nos necesitan.
¡Muchas gracias!
Gaby Albo