Soy Nichole Barrera, estudiante, trabajadora y habitante de la localidad de Suba, en el noroccidente de Bogotá. Siempre he creído que la educación es la puerta para lograr grandes propósitos, como lo es el cuidado del territorio del que somos parte y que muchas veces desconocemos por ignorancia o desinformación.

Con esa convicción creamos, junto a tres compañeros, el colectivo Verdessetas Huerta Los Magos, que busca defender los territorios naturales y, en especial, el Humedal Tibabuyes, que ha sido centro de polémica desde hace más de tres años por las obras que allí se adelantan y que impactan esa gran reserva natural de aves endémicas como la garza bueyera, garza real, tingüa de pico amarillo, patico zambullidor y garza nocturna; aves migratorias nacionales; vegetación acuática como las enea, buchón y helecho de agua y vegetación terrestre entre las que están nogal, roble, cedro, abutilón, mermelada, entre otras.

Alrededor de las actividades de educación ambiental que realizamos dos veces por mes en el barrio Lisboa convocamos a unas 30 personas en torno a jornadas de trabajo y limpieza en la huerta, realizar talleres con los niños, liderar caminatas y generar conciencia a través de diferentes encuentros con la comunidad. 

Nuestro propósito es formar ciudadanos de la vida; es decir, niños, jóvenes y adultos que conozcan su territorio y se apropien de sus recursos para que sepan cómo cuidarlos y defenderlos. Paso a paso, lo estamos cumpliendo: es increíble cómo los vecinos se maravillan con la huerta, con las enseñanzas que nos deja la tierra al cultivarla, y cómo los niños le dicen NO a la violencia y la exclusión del sector a través de ejercicios lúdicos en los que aprenden de la sabiduría de la naturaleza. 

Aunque la gente del sector se ha mostrado curiosa y ha participado con alegría, aún la tarea no finaliza. Hay personas que no saben qué es un humedal ni qué funciones cumple, porque creen que es un potrero y arrojan basura allí. 

SOS por el Humedal Tibabuyes, todos debemos cuidar nuestra tierra

Soñamos con incidir de manera positiva en el barrio Lisboa, queremos que esta zona sea reconocida porque protege el Humedal Tibabuyes y no porque lo destruye. Por eso, es importante construir un corredor ambiental real, no de cemento como el que han venido haciendo, sino un espacio en armonía con la comunidad, en el que sea prioridad la participación de los niños y jóvenes y el intercambio de saberes, así como el bienestar de los animales.

No obstante, siento que estos esfuerzos deben estar ligados a un compromiso político efectivo que, claramente no se ve reflejado en las obras que se adelantan en esta importante reserva, que conecta a las localidades de Suba y Engativá.

En el colectivo Verdessetas Huerta Los Magos queremos que no haya  indiferencia por parte de quienes toman las decisiones de nuestros territorios, los invitamos a que visiten el Humedal Tibabuyes y conozcan de primera mano por qué un puente de cemento o la tala de árboles no son necesarias para sacar provecho de nuestra riqueza natural. 

Los humedales no son acopios de basura ni lugares abandonados, requieren personas conscientes e informadas que se apersonen de los territorios que los rodean y cuiden aquellas especies que los habitan. 

No queremos que se repitan hechos como los acontecidos en 2020, cuando desalojaron a la fuerza a los campistas que protestaban por las obras. Tampoco queremos que más líderes ambientales abandonen sus causas o pierdan la vida por la falta de responsabilidad ambiental. 

En ese sentido, como voz de mi colectivo le pregunto a los congresistas que manejan el tema de medio ambiente: ¿Qué iniciativas se plantearán para que la ciudadanía se apropie y disfrute del humedal más grande de Bogotá sin afectar su conservación? ¿De qué forma se integrarán los humedales y las personas sin quitarles a estas reservas su función ambiental?

Tu firma es clave para que esta iniciativa sea conocida. Da clic en el botón naranja de apoyar y comparte con tus contactos en redes sociales para que mi pregunta llegue a mínimo 350 personas y haya respuesta por parte del Legislativo.