Somos Gloria Murcia y Juan Francisco Melo, gestores de la eco-escuela Casa Ocoa. Iniciamos este proyecto en el 2018 cuando decidimos dejar nuestros trabajos de oficina como economista e ingeniero industrial respectivamente, y vinimos a vivir al Valle de Ocoa, en la comuna de Hijuelas, región de Valparaíso.

Estamos ubicados a cinco minutos del Parque Nacional la Campana, en una zona súper rural. Quisimos que además de ser nuestro hogar, este fuera un espacio abierto a la comunidad, por lo que desde el primer momento abrimos talleres de bioconstrucción para levantar la infraestructura, con la asesoría del profesor y constructor civil Rodrigo Blum. Luego implementamos diversos talleres de yoga, masaje tailandés y domos geodésicos, todas actividades al alero de la sustentabilidad como nuevo paradigma de vida en tres pilares: medioambiental, social y económico.

La UNESCO, un organismo especializado de la ONU que, entre otras cosas, se dedica a identificar lugares que hay que conservar para permitir el equilibrio del ecosistema global, declaró a esta zona Reserva Mundial de la Biosfera La Campaña - Peñuelas por su biodiversidad, ya que hay especies endémicas y nativas que necesitan conservarse, además de la palma chilena que es emblemática en el sector Palmas de Ocoa del Parque Nacional, y que está en peligro de extinción. Además, Hijuelas es conocida como Capital de las Flores, ya que más de la mitad de la producción floral viene de esta comuna.

En estos años hemos visto cómo sin respetar nada de lo anterior, hay quienes arrasan con bosques nativos para plantar monocultivos, particularmente paltas, y lo mantienen a través del saqueo de agua, ya que al no ser propias de este ecosistema, sino de uno caribeño, necesitan mucho calor y mucha agua. Al alero de la actual Ley de Aguas, y con la lógica “del que tiene más, saca más”, el agua de todo el sector se la lleva el monocultivo de paltas, afectando en la calidad de vida de toda la comunidad y en desmedro de la pequeña agricultura, que es la base económica del valle de Ocoa. Además, el introducir flora exótica al ecosistema, impacta negativamente el ciclo del agua disminuyendo la lluvia y afectando el funcionamiento natural del ecosistema y de todas las especies que justamente se buscan proteger por un bien global.

Me gustaría preguntarles a los parlamentarios de nuestra región cuándo se va a legislar para proteger las 10 Reservas Mundiales de la Biosfera de nuestro país e impulsar su desarrollo sostenible, como propone la UNESCO. Falta contar con el peso de una ley que contemple lineamientos de acción, fiscalización y sanciones para quienes atenten contra estos sitios de apoyo a la sustentabilidad, como lo hacen los monocultivos abismantes que encontramos de norte a sur.

Te invitamos a visibilizar este tema. Si conseguimos 250 apoyos recibiremos una respuesta de las autoridades en esta misma web. Ayúdanos haciendo clic en el botón “apoyar” y difundiendo para proteger a las 10 reservas mundiales de la Biosfera que tenemos en Chile.