Me llamo Ainhoa, y hoy quiero compartir una situación que afecta profundamente a muchas familias como la mía. Tengo un niño con discapacidad que, como todos los niños, merece disfrutar de momentos de alegría, aprendizaje y convivencia en los campamentos de verano que se organizan para que los niños puedan quedarse con sus amigos al finalizar el colegio.

Lamentablemente, nos hemos enfrentado a una gran injusticia: a pesar de que nuestro hijo puede inscribirse en estos campamentos, nos comunican que no podrá participar por falta de profesionales. Es decir, nos dejan sin la oportunidad de que nuestro hijo disfrute de esa experiencia, sin darnos tiempo para reaccionar o buscar alternativas. Esto no solo es una discriminación, sino que también viola su derecho a la igualdad, a la inclusión y a la infancia.

La inclusión de todos los niños en actividades como estos campamentos es fundamental para construir una sociedad más justa, respetuosa y solidaria. Es importante que los futuros ciudadanos crezcan en un entorno donde la diversidad sea valorada y donde todos tengan las mismas oportunidades de disfrutar del ocio, de aprender y de socializar en igualdad.

Por eso, quiero reivindicar que nadie debería ser excluido por motivos de discapacidad. Es una obligación de las instituciones garantizar la accesibilidad y la inclusión en todas las actividades dirigidas a la infancia. No puede ser que, después de inscribir a un niño, se le excluya sin previo aviso y sin una solución alternativa.

Por favor, os pido que apoyéis esta petición. Necesitamos visibilizar esta situación y para que todos los niños puedan disfrutar de sus derechos sin discriminación. La inclusión no es solo un ideal, es un derecho de la infancia que debemos defender entre todos.

Gracias por vuestro apoyo y por ayudar a que esta voz sea escuchada. Juntos podemos lograr un cambio positivo para nuestras familias y para todos los niños.