Pregunta para Congreso de la República del Perú
¿Qué hacemos por los niños y niñas que viven en pobreza producto de la pandemia y el acceso a su educación escolar virtual?
Hola, me llamo Juan Chinchay. Tengo 70 años y vivo en Ventanilla (Callao). Tal vez me hayas visto trabajando por las calles del Centro de Lima con mi hijo Abelito. Él sufrió un accidente cerebrovascular desde muy niño y tiene discapacidad físico-motora que le impide continuar su vida con naturalidad.
Antes, yo trabajaba como panadero y mi esposa se encargaba de los cuidados de Abelito y mis dos hijos: Marcelo (16) y Miriam (13). A pesar de que mi esposa tenía una discapacidad física producto de un atropello de un automóvil, ella era un soporte enorme para mis tres hijos. Los educaba y los cuidaba, mientras yo laboraba por las mañanas y las tardes.
Todo iba con normalidad hasta que llegó la COVID-19. Mi esposa se contagió de esta enfermedad y falleció en enero de 2021. A partir de allí, dejé de trabajar como panadero y pedí ayuda incansablemente a muchas organizaciones del peruano para la salud de Abelito y la educación de mis tres hijos. Hasta el momento, nadie se ha pronunciado a mis peticiones.
La pandemia me trajo otro desafío muy grande: la conectividad al internet para las clases de Marcelo y Miriam. Tuve que improvisar con diversos aparatos electrónicos y con la poca conectividad en la zona para que continúen sus lecciones virtuales del colegio estatal. Mis hijos son la esperanza de continuar luchando contra cualquier adversidad.
Actualmente, yo vendo golosinas en el cruce del Jr. Azángaro y Jr. Cusco en el Centro Histórico de Lima, junto con Abelito. Estoy de lunes a sábado desde las 10 de la mañana hasta que anochece. Mucha gente de la calle se compadece y me colabora, pero muchas veces no es suficiente. Abelito requiere de numerosas medicinas y pañales especiales que son costosos.
A través de esta petición que impulso en Osoigo Perú, quiero concientizar a todas y todos sobre la realidad que viven mis hijos. Muchos padres, como yo, esperamos oportunidades para salir de la pobreza extrema y accesibilidad en la educación de nuestros hijos.
Mi deseo es que colaboraren con esta campaña dándole click en el botón de «APOYAR», llenando el formulario o firmar con tu cuenta de Facebook. El proceso es sencillo. Si logramos juntar todas las firmas requeridas, las autoridades peruanas tendrán que darnos una respuesta a través de Osoigo.com. ¡Es tiempo de salir adelante!