¿Cuándo se crearán iniciativas efectivas para erradicar la discriminación en México?

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De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud, en 2017 uno de cada mil recién nacidos presentó síndrome de Down, mientras que en México se estima que uno de cada 700 bebés la presentan… uno de ellos es mi hijo Max. 

Mi nombre es Rosa Elvira, me convertí en mamá a los 28 años, recuerdo mi embarazo como un periodo muy lindo, mi pancita creció mucho y la presumía con todo el mundo. El bebé y yo gozábamos de plena salud, hasta que el 01 de enero de 2020 comencé a tener contracciones y al revisarme, los doctores me indicaron que mi bebé estaba muy chiquito de talla y sus niveles estaban por debajo de lo normal, en ese momento me invadió la angustia y preocupación. Ese mismo día nació Max, después de un procedimiento rápido y doloroso, yo quería saber que mi hijo estaba sano, y los doctores me informaron que su condición era estable pero tenía rasgos de síndrome de Down.

Ante el desconocimiento y la falta de información, fue una noticia muy fuerte para mí, como cualquier mamá esperas que tu hijo nazca sano y sin complicaciones, Max estuvo un día en cuneros para estar en observación. Ese tiempo fue de gran ayuda para mí, prácticamente me derrumbé y pensé mucho en su futuro, pero a la vez abrí los ojos a una nueva realidad, una a la cual jamás pensé que me enfrentaría

Max nació sin cardiopatías ni problemas en la tiroides, pero estuvo hospitalizado por dos noches debido a un severo reflujo, ese momento fue un parteaguas para mí; entendí que la salud, estabilidad y desarrollo de mi hijo era más importante que una condición genética. Así que poco a poco fui investigando sobre el síndrome de Down, lamentablemente en México hay muy poca información útil, pero existe una comunidad de mamás que a través de redes sociales cuentan su día a día con pequeños con síndrome de Down, lo cual me ha ayudado a aceptar y conocer más al respecto. 

Comparto mi historia para visibilizar el síndrome de Down, así como solicitar a las autoridades que generen mayor información sobre el síndrome de Down para que cada vez seamos más personas las que conozcamos esta realidad en la cual se encuentran miles de familias. Con más información lograremos derribar los mitos, vivimos en una sociedad que aún te hace sentir pena si tienes alguna discapacidad, lo cual no debería suceder. Ante esto, es necesario que las autoridades impulsen iniciativas eficaces para erradicar la discriminación hacia las personas con discapacidad, a través de la empatía se podrá impulsar una sociedad que garantice una vida digna, respeto e inclusión.

En el futuro deseo que Max desarrollé las habilidades necesarias para convertirse en una persona independiente, que tenga fácil acceso a conocer y dedicarse a lo que le guste ya sea el arte, el deporte o la música. Sobre todo, me gustaría que viviera en una sociedad de igualdad, de inclusión y de respeto. 

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