Buenos días, agradezco sus comentarios acerca de la política hacia inmigrantes en Canarias, especificamente acerca de los casos que se pudieran plantear en referencia a hijos, nietos y bisnietos de Canarios venidos a Venezuela en el siglo pasado, por razones económicas producto de la guerra civil. Se que ya fué introducido en el Congreso de España la discución de la Ley con el respaldo total de los partidos políticos con una salvedad de un voto. Canarias es un gran propulsor de esta Ley y como Venezolano agradezco el interés mostrado. Sin embargo, desde mi punto de vista personal en referencia a la acojida que pudieramos tener antes de aprobarse dicha Ley (tal como se anticipa en el primer semestre del 2019), quisiera que se entendiera: Los inmigrantes no queremos dádivas y/o regalías desde el punto de vista económico, queremos la oportunidad de aportar con nuestro trabajo al desarrollo de Canarias y por ende de España, en retribución a lo dado hacia nosotros en épocas anteriores. Somos bien preparados profesional, cultural y espiritualmente, no queremos ser considerados como una carga para la República Española. Yo poseo las dos nacionalidades, Venezolano y Español, siempre consideré a Canarias como mi segunda patria por el amor inculcado por mi padre y lo cual transmití a mis hijas y ahora a mis nietos. Ellas emigrarán este mes por la situación de todos conocidos en Venezuela, dejando trabajo, hogares, familia, etc. Ellas dos reunen tres profesiones (llevan toda la documentación de profesionales y asuntos sociales apostilladas y legalizadas) y solamente quieren ser un aporte de trabajo, no quieren dadivas como ya indique.

Agradezco de antemano su interés en este tema de suma trascendencia, ya que fundarán una nueva vida en otro lar y para lo cual en estos dos últimos años se han estado preparando adicionalmente a su parte profesional, en el campo de los oficios manuales y laborales diferentes a sus profesiones. Su principal título que aportarán es la Humildad y Voluntad de Trabajar en cualquier área que séan requeridas.

Atentamente,

Ing. Francisco Benito y Flores

Caracas, Venezuela